Los hermanos Mitch y Mike McLusky navegan por Kingstown, hogar de varias prisiones, mientras actúan como enlaces entre los prisioneros y la comunidad. Cuando un joven guardia, Sam, está preparado para entregar una carta a un prisionero, Mike trabaja para sacarlo del apuro.

Bunny, líder de una pandilla local, se molesta cuando uno de sus muchachos es sacado del patio. Mike negocia un trato y luego es visitado por dos agentes del FBI para quienes Mitch trabajaba. Milo tiene instrucciones para Josef sobre cómo acercarse a Mike.

Después de que un trágico accidente tiene consecuencias mortales, se produce una persecución total. Mientras tanto, Mike se acerca a un ex contacto de la prisión.

Todos quieren algo de Mike, quien les recuerda quién tiene el control. Iris visita la oficina de Mike. Mariam y Mike hablan sobre el futuro de Kyle.

Kyle e Ian son interrogados por asuntos internos a raíz del tiroteo. Bunny le pide ayuda a Mike con un familiar cercano.

Cuando estalla una pelea en el patio, Sam se encuentra nuevamente en problemas. Milo hace todo lo posible para conseguir lo que quiere. Mike envía un mensaje.

Mike visita a Milo en busca de respuestas. Las tensiones en la prisión de hombres alcanzan un punto de ebullición. Mike hace un descubrimiento perturbador.

Kyle y la policía de Kingstown intentan encontrarle sentido a la escena del crimen. Mike toma el asunto en sus propias manos. Sam comete un error costoso.

Tracy tiene buenas noticias para Kyle. Mike e Iris pasan un día tranquilo en la cabaña, sin darse cuenta de la escalada de problemas en la ciudad.

La prisión de Kingstown desciende al caos total. Mike trabaja desesperadamente para ayudar a detener un motín que tendrá graves consecuencias para todos los involucrados.