Aiya sufre de un caso grave de insomnio y confusión de sueño-realidad debido a su trágico pasado. Para ponerle fin, deberá volver a donde todo empezó.

Advierten a Aiya de no regresar, pero ella está decidida a desenterrar el pasado. Llega a la isla a encontrarse con sus viejos amigos, quienes no están felices de verla.

Sin saberlo, Aiya se topa con una escena de crimen que confunde con una pesadilla. Cuando descubre que es real, sus amigos aceptan ayudarla a descubrir la verdad.

Aiya y Faye liman asperezas tras una emotiva plática. Win encuentra un viejo diario relacionado con la madre de Aiya, mientras que Faye halla más pistas sobre el enigma.

Aiya ruega a Sakka para que le dé información sobre su madre, pero su esposa se interpone. Aumentan las dudas mientras Aiya empieza a recordar al monje.

Finalmente el monje cuenta su historia, pero podría no decir toda la verdad. Los amigos de Aiya, que en un principio querían ayudarla, tratan de distraerla del caso.

Aiya encuentra obstáculos en cada esquina. Los involucrados en el caso original tratan de disuadirla, mientras que sus amigos comienzan a dudar de su memoria.

Se revela un secreto impactante. Aiya ya no puede distinguir a sus amigos de sus enemigos. Win, Mo y Aiya buscan en la biblioteca la respuesta al enigma.

La tragedia llama a la puerta. Aiya decide abandonar la isla después de que su búsqueda por la verdad empeora. Win y Faye empiezan a sospechar de sus padres.

La vida de Aiya pende de un hilo en tanto que sus amigos tratan de encontrarla. Acusan a Tatiya de un crimen, y Sua recibe una noticia impactante.

Aiya termina en el hospital tras un grave accidente. Desesperado por la situación, Witsanu promete contarle toda la verdad.

Witsanu finalmente revela la verdad y admite haber intentado embarrar los recuerdos de Aiya sobre esa fatídica noche. Sua y Mo revelan un terrible secreto.