En el mar, los campistas ven cielos soleados... y descubren un polizón a bordo. Un ataque sorpresa desde las profundidades los deja encallados en un lugar desconocido.

El cansado equipo elude el peligro en el desierto mientras trata de averiguar dónde está. Pero los campistas se encuentran con más preguntas que respuestas.

Con la ayuda de la doctora Turner, los campistas traman un plan para abandonar la isla que los lleva a cruzar un bioma ártico nevado... y hacer un intrépido rescate.

Tras descubrir la verdad sobre el jefe de Mae, Sammy decide acabar con él por su cuenta... justo cuando Mae se prepara para plantarle cara. ¡Llegan los robots asesinos!

Con Mae en estado grave y el horrible objetivo de Kash claro, los campistas juran salvar a los dinosaurios y detener a Mantah Corp. Pero hay robots por todas partes.

Darius tiene que usar su ingenio para distraer a Kash y proteger a los demás, así que finge odiar a los dinosaurios tanto corno él mientras averigua todo lo que puede.

Brooklynn debe idear un hackeo para ayudar a Darius, a quien persigue un robot de última generación. Kash se prepara para conquistar a un grupo de inversores.

Darius mantiene entretenido a Kash con partidas de videojuegos mientras los demás se cuelan en el criadero. Yaz le pregunta a Brooklynn qué siente Kenji.

El rechazo de Ben hacia una nueva amiga da paso al arrepentimiento... y a darse cuenta de que es hora de acabar con Kash. Kenji y Brooklynn afrontan sus sentimientos.

Justo cuando parece que las cosas están volviendo a la normalidad, el jefe de Kash llega a la isla de Mantah Corp. y empieza a poner en marcha un plan devastador.