Escrito por Martí Roures el 15 de diciembre de 2022
Cómo mola este tío...
Aquí Stephen Dorff, el clásico macarra de piscinas con placa, un vaquero con andares de perdonavidas y palillo en ristre. Sí, aquí está Stephen, como si realmente nos interesara lo que tiene que contarnos o mostrarnos.
Al principio habría jurado que se trataba de una parodia policíaca, a juzgar por los diálogos absurdos, la forma de imitar a Harry El Sucio y la dirección anárquica. Pero no. Parece que los tíos van en serio. Han rodado no sé cuántos capítulos que apestan a cliché ochentero barato, y se han quedado la mar de anchos.