Debbie y su hijo Justin son los propietarios de un ático en Sunshine Coast con unas vistas alucinantes y una decoración que rinde homenaje al perro salchicha.

Jay y Leah son jóvenes, guapos y tienen una pintoresca casita de playa cerca de la exclusiva Portsea. Pero no todos estarán contentos con el cuarto de baño compartido.

En el norte de Queensland, Gene y Sharon tienen su oasis en mitad de la selva donde llevar ropa es opcional, no hay puertas en los baños y hay una fuente de la juventud.

Con los 100 000 $ en juego, los finalistas reflexionan sobre cómo mejorar su hotel en función de los comentarios recibidos.

Las emociones están a flor de piel durante la gran final cuando los equipos se unen a los jueces Laurence Llewelyn-Bowen y Juliet Ashworth para nombrar al ganador.