Dando un novedosísimo giro, RuPaul da la bienvenida solo a las siete primeras reinas que se enfrentarán a un reto de eliminación y a una desafiante sesión de fotos.

Juntas por primera vez, las 12 concursantes se enfrentan a un reto playero y tendrán que representar parodias de películas de terror.

Las reinas se dividirán en dos grupos y deberán cantar en directo en un fantástico escenario donde no faltarán las lentejuelas.

El juego favorito de Drag Race vuelve, mientras que las reinas imitan a sus estrellas favoritas desde Dame Maggie Smith hasta Anna Nicole Smith.

Las raperas Eve y Trina valoran las actuaciones de las reinas en las que tendrán que versionar la canción de hip-hop "Oh No She Betta Don't".

Las reinas ruedan anuncios para la nueva línea de maquillaje de Ru; cada pareja tendrá una temática específica.

Las reinas brindarán al público en directo sus propios monólogos con resultados inesperados y divertidísimos.

Las reinas les lanzan preguntas muy personales a Chaz Bono (hijo de Cher) y a la cantante Georgia Holt (madre de Cher) en sus respectivos programas.

Las reinas transformarán a los novios en novias drags en una boda grupal oficiada por RuPaul y con Neil Patrick Harris y su pareja David Burtka como invitados.

Ru preside el reto en el que los jurados invitados, Bob Mackie y Khloe Kardashian, puntuarán a las reinas luciendo tres modelos inspirados en las joyas.

Las cuatro finalistas participan en el vídeo del nuevo tema de RuPaul, "Sissy That Walk", y se jugarán uno de los tres puestos para la final.

Alaska, Sharon Needles, Jujubee y Raven, entre otras exconcursantes, dan su opinión sobre los mejores y los peores (y desastrosos) momentos de la sexta temporada.

Las 14 concursantes se reúnen para hablar sobre la final y para rajar de la sexta temporada mientras que se preparan para la coronación de la próxima Drag Superstar.