Javi necesita hablar con Marta. Que ella no le coja el teléfono y que no sepa dónde está, no va a impedírselo. A Marta se da todo le va bien - su embarazo, su nueva vida sin Javi -, y sin embargo no es feliz.

Marta quiere vender la casa que compró con Javi pese a que este insiste en seguir viviendo dentro. Mientras tanto, Elisa se plantea en dar una nueva oportunidad a Nacho.

Marta quiere vender la casa que compró con Javi pese a que este insiste en seguir viviendo dentro. Mientras tanto, Elisa se plantea en dar una nueva oportunidad a Nacho.

A Marta le queda un mes para salir de cuentas. Javi presiona a Marcial, que fue quien les casó, para que le ayude a divorciarse de una vez por todas. Y esta vez las coincidencias coinciden en el mejor peor momento posible.

Javi quiere ayudar a Marta con Cristóbal. Sin embargo, no es tan fácil que Marta se deje ayudar, ni ocuparse de un bebé justo cuando el restaurante va a abrir. Javi tiene una sorpresa para a Marta el día de la inauguración. Ahora, solo tiene que conseguir que vaya.

Javi está muy agobiado. No solo Álex está viviendo ‘temporalmente’ con Marta en la casa, sino que además va a llegar la notificación de su divorcio y en el restaurante esperan a un crítico gastronómico para la primera crítica del local.

Javi y Marta han sido invitados, junto con Elisa, Nacho, Joaquín y los demás a la finca de Jesús. Josemi y él tienen una importante noticia que darles a todos.

Tras los trágicos acontecimientos, Javi tiene claro que no quiere ser como su padre. Un ‘accidente’ con Cristóbal hace que Marta llegue a una conclusión sobre su relación con Javi

Javi necesita alejarse de Marta una temporada. Por eso se marcha a vivir a la retirada finca de su padre, sin tener en cuenta la próxima boda de Nacho y Elisa. Sin embargo, si ‘Javi no va a la boda, la boda va a Javi’…