Cinco australianos que pasan las vacaciones a bordo de un velero se encuentran con un pesquero lleno de inmigrantes que buscan asilo. Los jóvenes deciden ayudarles, pero durante la noche el pesquero desaparece.

Ismail, que aún no se ha superado la pérdida de su hija, denuncia el crimen a la policía federal australiana. Ésta comienza a investigar a los jóvenes australianos.

Los jóvenes australianos esperan hasta saber si serán o no procesados, conscientes sin embargo de que el veredicto no proporcionará alivio a nadie. Mientras tanto, Ismail decide vengarse de lo que considera el símbolo de la tragedia.

Cuando por fin se descubre la verdad, Ismail, cegado por el dolor, decide vengarse. Mientras tanto, Helen se ofrece para defender a Bilal durante el juicio.