El don de Leo para ver fantasmas parece una maldición, pero cuando sus seres queridos se empiezan a convertir en zombis, solo él puede salvarlos.

Cuando un cañonazo derriba su nave, el equipo decide ayudar a un inventor estadounidense a luchar contra el monstruo que está atacando su ciudad.

Leo y sus amigos viajan a Alemania en busca de la mítica Hermandad, pero en lugar de esto encuentran un ser que provoca pesadillas.

La brújula de Leo dirige la nave hasta una desolada ciudad italiana cuyos habitantes pueden ver fantasmas y uno de ellos convierte a los espíritus en piedra.

Mientras investigan los avistamientos de un monstruo extraño que se roba las almas de los niños, Leo y el equipo encuentran una amenaza mucho más siniestra.

El equipo debe hacer frente a una tormenta para encontrar un portal al mundo de Quetzalcóatl, pero solo pueden atravesarlo si hacen un trato con un mítico lobo.

Desprovistos de la nave y sin Alebrije, el equipo llega hasta Londres y descubre que alguien le está robando los dientes a los huérfanos.

Determinado a encontrar a la Hermandad, Leo conduce la nave a una aldea japonesa atacada por los monstruos y donde no aplican las reglas habituales.

Leo lleva una horripilante muñeca a la nave y poco después empiezan a desaparecer los miembros del equipo... y Leo comienza a hablarles a las calaveras de azúcar.

Marcella le ayuda a Alebrije a recordar dónde perdió la Esfera y al parecer está en México, secuestrada por un sacerdote zombi.

Baba Yaga envía a un gólem tras un miembro del equipo, por lo que deben atravesar un portal al futuro para salvar a su amiga y al mundo.

Cuando el futuro del mundo está en peligro, Leo y la Hermandad deberán librar una guerra épica contra Quetzalcóatl y sus secuaces.