En busca de una vida más sencilla, el detective Kari Sorjonen y su familia se mudan a una tranquila ciudad, donde lo llaman inmediatamente para resolver un asesinato.

Mientras Sorjonen y el equipo inspeccionan la escena del crimen, la madre de Katia busca pistas en el resort. Alguien investiga el pasado de Sorjonen.

Lena encuentra una pista crucial sobre la identidad del secuestrador. Los secretos de Johanna la alcanzan. Degerman se pone en contacto con Pauliina.

Sorjonen investiga la sospechosa muerte del agente de un escuadrón de drogas, y Janina se ve involucrada en un círculo de adolescentes que planean una fiesta épica.

Una segunda muerte vinculada a las pastillas incita a Sorjonen a viajar a San Petersburgo con un nuevo miembro del equipo. En la fiesta, ocurre una situación incómoda.

El equipo investiga un indicio de la Europol sobre una red de peleas de perros. Hannu-Pekka le pide ayuda a Kari cuando una cita con una chica da un giro inesperado.

Lena se mete clandestinamente en un club de peleas, perjudicando su relación con Katia. Un colega le pasa a Sorjonen información sobre su objetivo.

El equipo se encuentra ante un nuevo reto cuando encuentran a una mujer viva en una trampa de pesca en el fondo del lago. Un político le pide un favor a Taina.

Cuando lo llaman a la escena de un choque mortal, Sorjonen intenta hallar la relación entre Elina y el coche robado. Pauliina continúa con su plan secreto.

Los mundos de Sorjonen chocan cuando Janina se despierta salpicada de sangre y se encuentra en medio de una investigación de homicidio.

Desesperado por limpiar el nombre de Janina, Sorjonen se apresura para conectar los fragmentos de distintas escenas de crímenes y atrapar al asesino.