Tras regresar de su viaje de bodas con Adrienne, Finch se da cuenta de que, si va a estar casado con una supermodelo, tendrá que cambiar de hábitos. Así, decide que sus congresos sobre ciencia ficción, el ajedrez por Internet y coleccionar soldaditos se han terminado.

Elliot recuerda a una adinerada mujer, llamada Sara, que conoció quince años atrás. Aunque le preocupa que su alto poder económico pudiera condicionar su propia 'perspectiva artística', Elliot decide ir a verla con la idea de pedirle que se case con él.

Elliot tiene que dar esquinazo a un joven fotógrafo muy pesado que está tratando de hacerse un hueco en el mundo de la moda. Sin embargo, al ver el producto de su trabajo decide darle una oportunidad y le contrata.

Finch se muestra celoso porque Adrienne ha invitado a cenar a un modelo. Por ello, le pide a Elliot que también les acompañe.

Nina logra ver a través de una ventanilla de aire acondicionado el desarrollo de una sesión de un terapeuta. Junto a Elliot y Finch se dedican a escuchar lo que pasa y para su sorpresa descubren que uno de los pacientes es Jack.

Siendo honesto consigo mismo, Finch llega a la conclusión de que entre él y Adrienne hay muy poco en común. Ante esta situación, Adrienne se queda de piedra mientras que Finch continúa creyendo que la honestidad es la mejor política que puede aplicar a su relación.

Maya invita a todos sus compañeros a una fiesta en su apartamento para que, al mismo tiempo, le ayuden a pintarlo. Un amigo de Elliot aparece por allí y le presentan a Maya. Aunque sus ideas sobre medio ambiente son muy opuestas, Maya acepta salir a cenar con él.

Tras pasar por un proceso de divorcio, Dennis cree que ya es hora de volver a la normalidad en sus relaciones con las mujeres. Mientras que Jack le sugiere que se tome algún tiempo para sí mismo, Finch está dispuesto a encontrar una mujer para presentársela.

Jack está preparando la adquisición de una revista en Francia. Para ello, decide hacer un viaje relámpago a París con Maya. Cuando está en el avión, se queda de piedra al ver a su ex mujer, Roberta, acompañada de su nuevo novio, Ernesto.

Aunque de forma cuidadosa, Jack da la bienvenida a la publicación de su tan esperada autobiografía. Mientras lee el libro, Maya se da cuenta de lo importante que ha sido su padre.

Tras el fracaso que supuso el intento de salir con Elliot, Maya descubre que este está saliendo con una modelo de la revista. Maya cree que la chica en cuestión no puede ser muy brillante. Sin embargo, la modelo es una preciosidad que se ha graduado como número uno de su promoción en Yale y está terminando la carrera de medicina.

Nina accede a acompañar a Elliot a casa de sus padres en Nueva Jersey para hablarles a un grupo de niñas scouts sobre el mundo de la moda. Nina comienza a contarles al grupo de jovencitas impresionantes historias de su propio pasado.

Nina se siente preocupada tras recibir un mensaje de su primer agente como modelo, Catherine. Y no es para menos, porque la señora tiene intención de suicidarse.

Maya y Elliot han comenzado una relación, aunque los dos discrepan a la hora de decidirse si lo hacen público o lo mantienen en secreto. Maya acepta ser discreta y mantener el secreto. Pero un día Nina les sorprende haciendo el amor.

Maya trata de convencer a Finch para que se apunte con Nina a un grupo de recuperación para adictos al sexo. Aunque no confía mucho en que la cosa funcione, Nina se lleva a Finch a una de las reuniones. Allí, Finch se queda de piedra al encontrarse con su ex mujer.

En un esfuerzo por encontrar cosas en común con Elliot, Maya decide acompañarle a una cena con unos amigos suyos. Allí, Maya se dará cuenta que Jann y Elsa no son su tipo.

A Nina y Elliot les asignan hacer la crítica de unos premios de moda. Maya, mientras tanto, se dirige a Jack para proponerle la creación de una revista para mujeres.

Un grupo conservador ha decidido demandar al Blush por el contenido más o menos sexual de sus portadas. Jack cree que con su habilidad no tendrá problemas en neutralizar la posible demanda. Pero tras reunirse con el carismático líder del grupo no está tan seguro.

Jack y Nina se preparan para celebrar el aniversario de su primer encuentro. Maya, por su parte, se presenta en la oficina con retraso tras haber pasado la noche con Elliot. Finch trata de convencer a Maya para que se marche a vivir definitivamente con Elliot.

Tras ser sorprendida despistada durante una reunión de la revista, Nina se ve obligada a confesar que lo que le ha distraído es el hecho de que sus progenitores biológicos han contactado con ella. Aunque nunca les ha visto, Nina sospecha que son unos pueblerinos.

La visita inesperada de una vieja compañera de patinaje, Nicole, tiene a Finch un poco preocupado. Hace 20 años Nicole tuvo un accidente en la pista de hielo que la obligó a dejar su carrera como patinadora. Ella consideró siempre que Finch tuvo la culpa.

Una cadena de televisión va a estrenar un programa biográfico sobre Nina en el que se repasa toda la vida de la editora de moda de la revista Blush, desde su abandono en una granja hasta su llegada a la ciudad de Nueva York.

Jack y Maya convencen a Finch para que se pase por un instituto y averigüe qué es lo que más les gusta los estudiantes de hoy en día. Finch se muestra reacio ante este trabajo, ya que considera que sus días en el instituto fueron nefastos.