Sospechoso de corrupción policial y de mala praxis, el policía Max Rossi es interrogado por el departamento de Asuntos Internos de la policía de París. Cuando el sospechoso toma una decisión inesperada, esta impactará en sus compañeros de equipo de policías del área de Hauts-de-Seine, quienes deciden hacer todo lo que esté en su mano para limpiar su nombre.

Comienza una etapa dolorosa para este equipo de policías. Aunque todavía cuentan con algún apoyo en la comisaría, el grupo comienza a derrumbarse bajo la presión. Roxane, por ejemplo, lucha contra su conciencia. Por otro lado, cuando Lemoine le da una paliza a Vachewski, descubre que fue su abogado quien le entregó a la policía. Además, Morlighem tiene deudas y le pide ayuda a Caplan.

Las vidas de los policías son absorbidas por las mentiras y tendrán que hacer lo que sea para salvar el pellejo. Vogel hace todo lo posible para pillar a Caplan y a sus amigos con la ayuda del fiscal, tratando de implicarles en casos turbios en investigación. No obstante, los cuatro compañeros saben que no solo ellos, sino sus familias, están peligro.

Incapaz de pagar su deuda de juego, Morlighem es secuestrado por una banda de gitanos. Los secuestradores envían fotos de él siendo torturado junto a una petición de rescate. Si quiere aparecer con el dinero para poder liberarlo, Caplan no tendrá otro remedio que acudir a Lemoine. Comienza la cuenta atrás.

Caplan está entre la espada y la pared: ha accedido a manipular un cajero para Lemoine para poder obtener el dinero del rescate de Morlighem. Cuando llega, Lemoine ha desaparecido y le espera una desagradable sorpresa. Caplan ha sido engañado y ahora está en el centro del huracán.

Se acaba el tiempo y Caplan sigue sin tener el dinero del rescate de Morlighem, además de haber sido engañado de nuevo por Lemoine. Caplan acepta la propuesta de Bordier, que consiste en volver a reclutar a veteranos de la reserva para lanzar una operación secreta para liberar a Morlighem. Mientras, Vachewski descubre que se está trabajando en identificar a los ladrones del cajero. Las tensiones unen más a los colegas, rodeados por el peligro.

Lemoine es arrestado por Marceau, y el futuro del grupo de policías está en juego en la sala de interrogatorios. No obstante, el ladrón solo quiere hablar con Caplan, y le ofrece un trato: si consiguen sacarle de ahí no dirá ni una palabra. Caplan, Vachewski, Morlighem y Roxane preparan un plan de escape, pero... ¿qué deben hacer con Lemoine si consiguen liberarlo?