Erskine sigue el rastro de un convicto en fuga, cuya especialidad es extorsionar mujeres.

El intento de destruir la foto de un empleado bancario lleva al FBI a revisar los libros del banco… que revelan una faltante de más de 100.000 dólares.

El apache Joe Cloud (Alejandro Rey) regresa a la reservación donde vive, y alli se encuentra con que un hombre está atacando a su esposa.

Un bandido solitario asalta un banco dos veces en tres días… en las fechas exactas que se produjeron robos en ese mismo banco, pero 20 años atrás.

El FBI investiga un asesinato a bordo de un transatlántico de lujo. El sospechoso: el hijastro millonario de la víctima.

La ironía se une al suspenso cuando Erskine debe rescatar a una víctima de secuestro, Bert Anselm (James Gregory), que es un traficante de pornografía a quien el FBI está tratando de encarcelar.

Los agentes del FBI investigan el intento sabotaje a un depósito del Gobierno, abastecido con suministros destinados a Vietnam.

En base al dato de un informante, Erskine arresta a Harry Castle (John Milford), bajo el cargo falsificación de cheques. No pasa mucho tiempo antes de que el agente sospeche que tiene al hombre equivocado.

En Florida, unos exiliados latinoamericanos conspiran para invadir y liberar su patria… pese a las advertencias del FBI de que hay un traidor en su grupo.

Unos mensajes de radio, recogidos por la Comisión Federal de Comunicaciones, alertan al FBI sobre un plan para destruir un misil, que está siendo trasladado desde Arizona hasta su sitio de lanzamiento en California.

Erskine busca a dos hombres que robaron un camión de armamento del Cuerpo de Marines, matando a un infante en el proceso.

Los agentes tratan de resolver el misterio de un muchacho que entró muy agitado en la sede del FBI -portando 500,000 dólares- y luego perdió el conocimiento.

El FBI busca a un adolescente que hizo explotar un tren, y que amenaza hacer estallar a otro… a menos que la compañía ferroviaria le pague 100,000 dólares.

Ya absuelto de un asesinato, el soldado raso Byron Landy (Bruce Dern) está de nuevo en la silla de los acusados cuando la esposa de un capellán del Ejército es asesinada.

Un vengativo camionero roba uno de los camiones de su compañía… sin saber que contiene pieles por valor de 500.000 dólares.

El chantaje se une a los incendios intencionales cuando un intolerante extorsionador amenaza con incendiar la sede de un poco numeroso grupo religioso.

Erskine sigue la pista del estafador Stephen Fitzgerald (James Daly), quien se casó con la viuda de un banquero, malversó el dinero del banco… y luego asesinó a su esposa.

Erskine y Rhodes toman trabajos en una planta de misiles para investigar una falla de seguridad… y atrapar a un espía.

Mientras intenta atrapar a un ladrón de bancos, Erskine se encuentra con una red que saca criminales fuera del país.

Un prometedor aprendiz del FBI se enfrenta a una prueba crucial, cuando el primo con el que creció intenta volar un edificio del Gobierno.

Erskine se hace pasar por un trabajador del departamento de estado, al que unos agentes enemigos le pidieron que espiara en los Estados Unidos.

Una niñera mentalmente desequilibrada secuestra a la beba que tiene a cargo.

Durante un vuelo comercial con destino a Seattle, un pasajero saca un arma… y exige ser llevado a la región comunista de Manchuria.

Con fecha fijada para ser juzgado por fraude, Mark Tabor (J.D. Cannon) debe huir y esconderse cuando el sindicato realiza un atentado contra su vida, por temor a que su testimonio los comprometa.

Cuando una planta química explota, los agentes investigan la posibilidad de un sabotaje, sin saber que la explosión fue planeada por un químico desquiciado (Bradford Dillman).

Parte 1. Un criptógrafo de primer nivel de una potencia extranjera, que aparentemente está preparado para desertar a los Estados Unidos, es reportado muerto en un incendio.

Parte 2. Erskine corre contra el tiempo para hallar al Dr. Gregory Holman (George Voskovec) antes que los agentes de su propio país lo maten.

El joven Dan Winslow (Kurt Russell) ha sido secuestrado, y su millonario padre se vuelve cada vez más crítico con los procedimientos del FBI para rescatarlo.

En Nuevo México, Erskine y Rhodes rastrean a cinco convictos prófugos, uno de los cuales mató a dos oficiales de la ley.

Erskine está desconcertado por un robo bancario organizado por cuatro hombres, quienes lo planearon de forma muy intrincada y meticulosa, pero solo robaron una pequeña porción del dinero.

El FBI busca a Dale Hillman (Robert Drivas), un sospechoso de asesinato que se prepara para ingresar a un ejército privado de extremistas.