Una cita por casualidad con Jeong Gu-won logra sacarle los colores a Do Do-Hee. Luego, la joven es víctima de un ataque... y su salvación implica un contrato.

Gu‑won pierde sus poderes inexplicablemente... y descubre que Do‑hee podría ser la clave para recuperarlos. Pero sus esfuerzos por hacerlo no surten el efecto deseado.

Tras sufrir otro ataque, Do-hee le pide a Gu-won que la proteja... pese a que ha confesado ser un demonio. La muerte de alguien cercano despierta las sospechas de la joven.

Gu-won rechaza la propuesta de matrimonio de Do-hee. Después ella le pide que investigue la muerte de Ju Cheon-suk, pero sus poderes no funcionan del todo bien.

Los sentimientos entre Gu-won y Do-hee se complican tras un dramático rescate. Más tarde, Do-hee intenta encontrar un hombre con el que casarse, lo que frustra a Gu-won.

Después de que Gu-won le salva la vida, Do-hee recibe dos propuestas de matrimonio. Al final se decide por un pretendiente... y descubre algo inquietante durante su boda.

Do-hee y Gu-won tratan de vivir juntos, pero sus desavenencias de recién casados les pasan factura. Ju Seok-hoon empieza a sospechar que Gu-won no es realmente humano.

Gu‑won sufre un ataque y Do‑hee se apresura para salvarle la vida. Luego, la joven toma una inesperada decisión profesional para proteger a quienes la rodean.

Do-hee y Gu-won disfrutan de su relación, pero el joven empieza a experimentar cambios extraños (y fatídicos) en sus poderes. Entretanto, una amenaza mayor cobra fuerza.

Tras descubrir su destino, Gu-won intenta encontrar otra forma de salvarse a sí mismo. Pero mientras él y Do-hee preparan el ritual, la joven se convierte en un objetivo.

Tras salvar a Do-hee de una muerte segura, Gu-won recupera sus poderes... pero con efectos secundarios. Sin tiempo que perder, los dos se ponen a investigar el ataque.

Un sueño de la vida anterior de Gu-won revela su trágica conexión con Do-hee. Luego, una muerte agudiza las sospechas de ambos sobre la familia Noh.

Gu-won y Do-hee son muy felices, hasta que él descubre el trauma que ella no ha resuelto. Cuando van a cenar con Noh Suk-min, no saben lo que los espera.

La policía no encuentra el cuerpo de Suk-min, dando pie a una posibilidad inquietante. Do-hee intenta reprimir lo que siente cuando Gu-won desaparece sin dejar rastro.

Una gran pérdida deja a Do-hee en un estado catatónico. Desesperada por que Gu-won vuelva, la joven pide un deseo navideño... y Noh Suk-nyeo la escucha.