Dos hermanos presencian la muerte paranormal de su madre y son entrenados para la lucha por su padre, cuyo objetivo es cazar al ente que mató a su esposa.

Sam y Dean siguen las coordenadas del diario de su padre y llegan a Colorado, donde investigan la desaparición de varios acampantes.

En un pueblito de Wisconsin, Sam y Dean investigan una serie de misteriosas muertes por ahogo, registradas oficialmente como suicidios.

Las pistas para encontrar a John se están enfriando. Mientras en una población de Nebraska, tres jóvenes están practicando el juego de "Bloody Mary". Según una leyenda urbana, se utiliza para invocar a un espíritu. Pero el juego deja de ser divertido y se convierte en algo terrorífico.

Sam y Dean ayudan a un amigo de la universidad de Sam después que lo acusan de asesinato. Los hermanos descubren que hay alguien que se transforma en otras personas para asesinar. La carrera para frenar las muertes toma una dirección horripilante cuando la criatura se transforma en Dean.

En un pequeño pueblo de Iowa, Sam y Dean encuentran al infame "hombre del garfio", un espíritu que mata a sus victimas con el gancho brillante que sustituye su mano.

Dean y Sam llegan a un pueblo siguiendo la pista de una misteriosa muerte. Se acercan a una casa de un vecino que está haciendo una barbacoa y allí conocen al hijo de éste, un muchacho obsesionado con los bichos. Al poco tiempo, una invasión de desagradables bichos invade el pueblo y tal vez no haya escapatoria.

Cuando Sam comienza a tener pesadillas con su antiguo hogar, los hermanos deciden volverse a Lawrence, en Kansas, para investigar qué ocurre. Descubrirán que una nueva familia se ha mudado a la casa, una madre con sus dos hijos, lo mismo que Sam vio en su sueño. Sospechan que lo que mató a su madre aún sigue en la casa.

Sam y Dean investigan un asilo algo misterioso y con un pasado incierto, donde se supone que han vivido ciertos abusos. Una fuerza misteriosa aparece y hace que Sam se vuelva loco y vaya a por su hermano.

El padre de Sam y Dean les envia a un pueblo en el que sacrifican parejas de enamorados a un dios pagano que se aparece con forma de espantapájaros.

Dean sufre una fuerte descarga eléctrica mientras 'trabajan' y su corazón queda dañado. El médico tan sólo le da un mes de vida y Sam intentará por todos los medios ayudar a su hermano. Decide llevarle a un pueblo en el que aparentemente un hombre es capaz de curar. Sin embargo, la magia negra estará detrás de todo.

Sam y Dean viajan hasta Missouri para investigar una serie de accidentes de coche en el que mueren hombres negros, y todos relacionados.

Sam tiene una premonición que lleva a los hermanos a investigar una muerte algo sospechosa vinculada a un muchacho con poderes de telequinesia.

Dean va en busca de Sam cuando éste es secuestrado por una familia que se dedica a cazar humanos y coleccionar partes de su cuerpo como trofeos.

Sam se reúne con Meg y se da cuenta de que ésta utiliza a los hermanos como cebo para atraer a su padre y matarle.

Sam y Dean van hasta un pueblo en el que hay una granja encantada. En un principio creen que se enfrentan al mismo espíritu que mató a su madre pero se darán cuenta de que es algo mucho más poderoso.

Sam y Dean lucharán contra un demonio que entra en las habitaciones de los niños y les roba el alma. Dean recordará que a él le ocurrió lo mismo y deberá enfrentarse a lo que sintió por aquel entonces.

Sam y Dean se enfrentan al retrato de una familia que acaba con todos aquellos que lo poseen.

Para lograr el arma que posiblemente acabe con el demonio que mató a su madre, John, Sam y Dean deberán enfrentarse a unos vampiros.

John descubre el próximo golpe del demonio y se dirige hacia allí con Sam y Dean para evitar un nuevo asesinato. Sin embargo, Meg comienza a matar a todos los conocidos de John y amenaza con seguir haciéndolo si no le entregan lo que pide.

En una misión para salvar a su padre de las garras de Meg, Sam y Dean buscan ayuda de un viejo amigo de la familia.