Nasa y Tsukasa siguen con su vida de casados, disfrutando juntos del día a día, pero cuando Kaname le pregunta a Nasa si piensan celebrar una boda, nuestro protagonista no sabía dónde se estaba metiendo.

Una antigua profesora de Nasa se encuentra con él y descubre que se ha casado, ¡y se teme lo peor, así que decide visitar su casa! Luego un misterioso joven con aspecto de yakuza aparece en la casa de baños buscando a Nasa. ¿Problemas?

Ginga regala a Nasa y Tsukasa unas entradas para un popular parque al que irán a pasar el día y disfrutar.

Cada beso tiene un significado, pero ¿se besan lo suficiente Nasa y Tsukasa como matrimonio que son? ¿Y dónde es mejor dar un beso a tu pareja? Aunque primero tendrán que ayudar a Kaname, quien tiene un grave problema.

Kaname regala a Nasa un viaje para dos a unas aguas termales de lujo, lo que supone la ocasión perfecta para que él y Tsukasa tengan su particular luna de miel.

Nasa y Tsukasita están de viaje en las aguas termales y llega el momento de que Nasa se arme de valor y pida a su esposa lo que tanto desea: bañarse con ella.

Llega el verano y Nasa y Tsukasa se percatan de algo: el aire acondicionado de su cuarto no funciona, así que es hora de pedir permiso a Kaname para comprar uno nuevo y poder dormir fresquitos.

Un día veraniego con los problemas de Tsukasa con la tecnología, una visita inesperada de alguien que contraerá matrimonio y otra más inesperada ofreciendo algo peculiar.

Tras la propuesta de Tokiko de ir de acampada, Nasa está muy ilusionado y Tsukasa decide aceptar, pero acabará siendo un viaje rodeados de amigos y familia.

Tokiko y compañía preparan una fiesta sorpresa para Nasa y Tsukasa con la que celebrar su matrimonio.

Tokiko y Nasa hablan en el último día del campamento. Más tarde, una nueva noticia llega a Nasa: su viejo apartamento pronto estará listo tras la reconstrucción que tuvo que sufrir después de incendiarse.