We meet Rosemary lying on the floor of her house, sobbing. Heartbroken. The doorbell rings. It's a Pizza Delivery Guy. Rosemary can't stop crying. She wants love, but it never works out. Fortunately for Rosemary, this Pizza Delivery Guy has the answer: forget about love and focus on wild random sex for once in her life. We cut to a fun slut-training montage where Pizza Delivery Guy teaches Rosemary his skanky ways and Rosemary learns to sexually liberate herself. Rosemary thinks she's mastered slut life, but her new skills are put to the test when she meets Ned.

마음에 상처를 입은 여성이 피자가게에서 일하는 남자의 조언으로 섹스와 사랑을 분리하는 법을 배우게 된다. 무작위의 관계를 통해 재결합하는 법을 배우게 된다.

Nos encontramos con Rosemary tirada en el suelo de su casa, sollozando. Con el corazón roto. El timbre suena. Es un repartidor de pizzas. Rosemary no puede dejar de llorar. Ella quiere amor, pero nunca funciona. Afortunadamente para Rosemary, este repartidor de pizzas tiene la respuesta: olvídate del amor y concéntrate en el sexo salvaje al azar por una vez en su vida. Pasamos a un divertido montaje de entrenamiento de zorras en el que el repartidor de pizzas le enseña a Rosemary sus formas skanky y Rosemary aprende a liberarse sexualmente. Rosemary cree que ha dominado la vida de puta, pero sus nuevas habilidades se ponen a prueba cuando conoce a Ned.