Invierno. Bajo cero. Noche cerrada. En mitad de una carretera despoblada, un furgón blindado es asaltado durante un traslado de presos. Alguien busca a uno de los presos y no parará hasta sacarlo. Su plan no tiene fisuras, no le importan las consecuencias, nada le va a detener. Pero Martín, el conductor del furgón, consigue atrincherarse dentro del cubículo blindado con los reclusos, convirtiéndose en su único obstáculo. Obligado a entenderse con sus enemigos naturales, Martín tratará de sobrevivir y cumplir con su deber en una larga noche de pesadilla que acabará haciendo que ponga en duda todos sus principios.
Leonor (Anna Castillo) quiere marcharse de casa, pero no se atreve a decírselo a su madre. Estrella (Lola Dueñas) no quiere que se vaya, pero tampoco es capaz de retenerla a su lado. Madre e hija tendrán que afrontar esa nueva etapa de la vida en la que su mundo en común se tambalea.
A Luisa se le ha estropeado la lavadora. El inicial desastre que supondrá en su hogar esta avería se acabará convirtiendo en la coartada perfecta para romper con su lenta cotidianeidad. Pero para su marido, la ausencia de lavadora implicará una ausencia aún mayor: Luisa ya no está en casa cumpliendo con su condición de ama de casa y esposa sumisa.