Mientras Jack y Sherry se dirigen a su confrontación final con Peter Kingsley, Novick recibe nuevas pruebas sobre Kingsley y le ordena a la CTU que ayude a Jack.

Mientras Jack lidia con un problema personal secreto, terroristas narcotraficantes amenazan con soltar un virulento virus de peste a menos que su líder sea liberado de la prisión.

Jack y los Salazar se enteran de que tienen un rival en la subasta del virus; los hombres de Salazar torturan a Chase; el contribuidor más importante de la campaña de Palmer le ordena despedir a Wayne; Kim y Michelle se dan cuenta de que Tony no está apto para trabajar.

Mientras Nina recibe la entrega del virus por parte de Amador, la CTU se desplaza para interceptar la operación; Sherry no tiene éxito en su primer intento de chantajear a Milliken y Kim se entera de que el bebé de Chloe no es de ella.

Presentada con la evidencia de las acciones de Olivia, la Presidenta Allison Taylor se ve obligada a tomar una decisión entre su familia y la Presidencia. Gracias a Kim Bauer, Janis, Renee y Chloe pueden salvar a Jack y arrestar a Tony antes de que pueda matar a Alan Wilson. Con Wilson negándose a hablar y Jack a punto de morir, la pelea ya no está en el campo, es por los corazones y almas de Jack y Renee.