La tempestuosa y ambiciosa concertista de piano Sandra Kovac (Mary Astor) mantiene una estrecha relación con Maggie Van Allen (Bette Davis) y su hijo Pete. Sus elegantes amigos de Nueva York no alcanzan a imaginar qué pueden tener en común estas dos mujeres. Lo que ocurre es que ignoran que Pete es hijo de Sandra y de un heroico aviador (George Brent) a quien aman las dos mujeres.
En la iglesia se está celebrando la boda de Ellen y David, pero en el momento en que el sacerdote pronuncia la frase "Si alguien conoce alguna razón por la que este enlace no deba celebrarse..." un hombre se levanta y afirma que Ellen ya está casada. Se descubrirá entonces que, en otro tiempo, tuvo un marido que fue asesinado y resulta que todos los indicios la convierten en sospechosa.