Fuerzas especiales de asalto entran en el bunker del jefe de la Mafia Molocco donde le encuentran en el suelo cubierto de sangre. En la cocina una estatua de la Virgen llora sangre. El primer ministro Pietromarchi es llevado a una piscina en desuso dónde el general Votta le enseña la estatuilla: llora sangre humana, nueve litros por hora; un milagro que desafía todas las leyes físicas. Sandra, una agente de policía y hematóloga coge una muestra de sangre en secreto y se la suministra a su madre que está en coma. En el lado contrario de la ciudad, el padre Marcelo, un cura de los suburbios de Roma despilfarra dinero apostando en casinos y en prostitutas.

Calabria, sur de Italia. Beatrice, hija del capo Molocco celebra su primera comunión en familia. Después de jugar durante un rato con su amigo Nicolino, éste aparece en el banquete con el cuerpo desnudo de Beatrice entre sus brazos. En Roma, mientras la mujer del primer ministro experimenta problemas familiares con sus hijos, Sandra continúa sus investigaciones sobre los posibles efectos del plasma sobre su madre enferma. El primer ministro se reúne con el padre Marcelo al que conoce de años atrás. “Los milagros son para aquellos sin fe, a punto de perderla” le dice el cura. Juntos visitan la estatua de la Virgen llorando sangre. Al verla, Marcelo se desploma en el suelo.

La familia de Nicolino, el niño que jugaba con Beatrice en el episodio anterior, es desterrada al completo. Ni si quiera, el hecho de que Salvo, padre de Nicolino, trabaje para el capo, puede evitarlo. El general Votta acude a la cárcel para interrogar al capo Molocco pero al llegar se lo encuentra muerto. Acto seguido pide a Sandra que mande una muestra de sangre de la Virgen a un laboratorio americano para que lo analicen en detalle. Mientras tanto, el primer ministro se encuentra con Marcelo quien le dice “Realmente es un milagro” y si la Virgen de verdad ha aparecido tiene que haber una razón. El primer ministro se muestra todavía escéptico aunque pronto comienza a tener extraños sueños que harán que se cuestione todo.

Molocco pide a Salva que para restablecer la relación perdida debe sufrir como él lo hace y para ello debe matar a su propio hijo Nicolino. Sole, la mujer del primer ministro, pierde los nervios estando de compras con sus hijos y abofetea a uno de ellos - la imagen pronto se hace viral. La vida de Marcelo se complica por momentos también. Justo cuando cree haber visto a la Virgen en sueños se entera que ha sido ex procesado y por tanto expulsado de la iglesia. A su vez Sandra recibe por fin noticias sobre la muestra analizada. El ADN de la sangre de la Virgen pertenece a un hombre, edad aproximada de 30 años, ojos marrones, pelo oscuro y daltónico.

Sole y Fabrizio discuten acaloradamente después de las imágenes de ésta con sus hijos. Presionado por la pérdida de la confianza de los votantes en la cuestión del referéndum, Fabrizio pide que su mujer se excuse ante los medios. Sole acepta, pero despide a su niñera como represalia causando gran dolor a su hija mayor. Mientras, y en contra de la opinión de Sandra, se decide guardar la estatua de Virgen en un congelador para que deje de llorar. Siguiendo su propia investigación, Votta llega al santuario de Barbana dónde parece que la estatua en cuestión fue hecha. La base de datos de los servicio secretos identifican el adn de la sangre que llora la Virgen como Amin Tarek.

Amin Tarek recluta 2 trabajadores por las calles de Bruselas. Uno de los éstos muere en su primer día en frente de la mirada de su novio Hassan. En Roma, la madre de Sole se lleva a sus hijos temporalmente fuera de Roma hasta que Sole pueda completar su entrevista con los medios. Sandra, decide volar a Bélgica y encontrar a Amin en busca de respuestas. Al encontrarlo las cosas pronto se complican para Sandra que se ve metida en una situación de la que es difícil salir. Mientras, la tragedia se asoma en casa del primer ministro.

Salvo no consigue matar a su hijo tal y como la mafia le pidió. Después del incidente de la piscina Carlo se encuentra en estado grave. Sole está devastada por la culpa mientras Alma sigue sin entender la gravedad de la situación de su hermano. En el centro de rehabilitación Marcello recibe la visita de Cledia que le ayuda a escaparse. Éste sigue sin entender el porqué de la devoción que ésta siente por él – pronto descubrirá el por qué.

La casa del primer ministro se encuentra llena de periodistas después de la muerte de Carlo. La familia afronta duros momentos juntos mientras Pietromarchi se prepara para el resultado del referéndum. Mientras, Marcello promete a Cledia entrar en una clínica en Suiza para recibir tratamiento aunque en su lugar decide ir a ver de nuevo la estatuilla de la Virgen donde recibe un disparo a mano de los guardas. Clelia llega a Calabria decidida a encontrar al hijo que dio en adopción hace 35 años. Sandra visita una clínica en las Islas Canarias donde el Doctor López acepta fertilizarla usando ADN de la sangre de la Virgen. La temporada termina con el general Votta celebrando la boda de su madre en su casa.