Es el principio del siglo XVI y Martín Lutero es un joven profesor de teología, amado por sus alumnos, en la Universidad de Wittenberg. En este periodo, la Iglesia Católica vendía indulgencias a la gente común. A través de ellas esperaba disminuir el tiempo de espera en el purgatorio después la muerte. En contra de esta práctica, Lutero empieza a oponerse públicamente a la idea de que la gente deba pagar a la iglesia para ser liberada de sus pecados.

Spalatin, otro profesor de la universidad, convence a Lutero para publicar sus escritos contra las ventas de indulgencias y hacer que la población sepa que ningún hombre debería tener que comprar su libertad. La revolución comienza con la publicación de estos documentos y avanza con la primera conferencia de teología en alemán, en lugar de en latín.

Dar conferencias en alemán se convierte en algo revolucionario ya que, gracias a ello, los campesinos pueden entender verdaderamente la palabra de Dios.

Lutero recibe una bula papal por la cual si no redacta sus tesis dentro de 60 días, será excomulgado. Lutero quema el documento frente a los estudiantes y anuncia que no se retractará de sus tesis, dejando a todos asombrados.

Lutero se ve obligado a esconderse para no ser capturado por el Arzobispo Albrecht von Spalatin. Lutero, escondido en Wartburg, comienza a traducir la Biblia al alemán. Sin embargo, cuando oye hablar de la iconoclasia de sus amigos de la Reforma, decide partir.

Müntzer lleva a los granjeros a la guerra pero pierde. Al final, Lutero se pone del lado de los príncipes y se casa con la monja huida Katharina von Bora.

Ottilie es la primera monja en huir del monasterio. Se corta el cabello y se erige como modelo a seguir para la emancipación de las mujeres. Se casará con Müntzer y usará su ropa masculina.