Maomao está de vacaciones en casa, pero ni siquiera allí se libra de los (casi) desastres. Una prostituta y su cliente aparecen envenenados. ¿Descubrirá Maomao la verdad?

Jinshi le ha devuelto a Maomao su antiguo trabajo, o eso es lo que ella cree. Todo es muy distinto a como Maomao pensaba, así que tendrá que hacerse hueco en un nuevo lugar.

Maomao se convierte en instructora y da a las consortes de alto rango una importante lección. Pero también se plantean nuevos misterios.

Maomao recibe el encargo de resolver un misterioso caso de envenenamiento. Mientras tanto, Jinshi tiene que lidiar con un excéntrico conocido en todo el palacio que tiene una petición sorprendente.

Maomao cuida de una antigua prostituta, y aunque a la joven boticaria le gustaría concentrarse en su trabajo, tiene muchas cosas en la cabeza.

Jinshi tiene que conseguir rosas azules para la fiesta del jardín. ¿Podrá ayudarle Maomao...?

Lakan cumple su promesa y compra a una cortesana. Maomao celebra la compra bailando bajo las estrellas y bajo la atenta mirada de Jinshi.