Dicky encara al futuro padre del bebé que espera su hija Charo para que se haga cargo de la situación. Por otra parte, Lorna Vilma y Darling se unen “por una buena causa”. Y, como corolario, Dicky tendrá problemas con una

nueva actriz que contrata para uno de sus portfolios.

Enterado del embarazo de su hija Charo y, sobre todo, de quién es el futuro padre de la criatura, un “viejo conocido” suyo, Dicky decide tomar el toro por las astas y encarar a Malvestit, el nombre del “responsable del hecho” para que se haga cargo de la situación, aún a sabiendas que está casado y con dos hijos adolescentes. Esta conducta sumamente impulsiva es causal de una nueva discusión con Charo, quien ya está cansada de que se entrometan en su vida.