Gemma organiza otro acto para recaudar fondos que trae de vuelta a la ciudad al antiguo miembro del club responsable de la detención de Opie, lo que crea un conflicto directo con Jax y Opie; Clay se encarga de proteger a un hombre que está en libertad condicional con la esperanza de conseguir algo gordo a cambio; y el agente Kohn sigue investigando a Sons of Anarchy.

Cuando un miembro de Sons of Anarchy desaparece y otro es detenido y acusado de asesinato, Jax tiene que elegir entre la amistad o el club; y Abel se fortalece y pronto le darán el alta del la UCI, pero no va a ser el único que vuelva a casa.

El club necesita dinero para financiar la defensa de Bobby, pero la solución de Clay deja a Sons of Anarchy en una situación muy vulnerable; y lo que debería ser una feliz bienvenida para Abel se acaba convirtiendo en más problemas para el club.

Después de una gran tragedia, el club tiene que analizar sus vínculos de hermandad.

Un grupo separatista blanco se instala en Charming para desafiar al SAMCRO. Clay firma un nuevo trato de venta de armas con el IRA. Bobby sale de la cárcel. Y Opie regresa para intentar vengar la muerte de Donna.

Mientras el SAMCRO se tiene que mover en un ambiente hostil, el agente Stahl regresa a Charming con una oferta para el club. La riña entre Jax y Clay llega a las manos. Y Opie hace un nuevo amigo.

Los actos de la Liga empiezan a dar sus frutos mientras el SAMCRO se empieza a deshacer. Viejos amigos y enemigos reaparecen con distintos resultados. Jax entra sin darse cuenta en territorio enemigo. Y Clay intenta recuperar una mercancía valiosa.