El malvado hechicero Damodar desafía un peligroso vórtice para robar el orbe elemental negro, el cual le servirá para preparar un plan siniestro de venganza contra el reino de Ismir. Berek, un guerrero, y Melora, una bruja aficionada reunen a cuatro guerreros más, para luchar contra el ejército de criaturas espantosas de Damodar, y así poder recuperar el orbe que devuelva la estabilidad al reino.
Profion, un mago maligno, está tramando destronar a la nueva emperatriz de un legendario país. Ella recluta un grupo de aventureros y un pícaro que deben encontrar un objeto mágico que frustrará el plan del mago. Se trata de la Barra del Control del Dragón, cuyo portador adquiere la capacidad de controlar dragones. Pero el mago también encarga a sus ayudantes la búsqueda de la Barra.
En 1818, la familia Bell empieza a percibir extraños fenómenos. Al principio, son simples sonidos: pequeños ruidos inexplicables, una respiración dificultosa, pasos; pero con el tiempo la potencia de estas manifestaciones paranormales aumenta. El espíritu que las produce se vuelve agresivo y empieza a descargar su ira sobre John Bell y su hija Betsy, víctima de violentos y constantes ataques. En 1998 fue hallado un manuscrito de un maestro de escuela (que había convivido con los Bell), en el que se revelaba la causa del maleficio.