A Sharon no le convence la convivencia con Rob, al que por otra parte nadie parece apoyar en su idea de casarse con ella. Por suerte, el hermano de Sharon se muestra algo más entusiasta y ayuda a Rob en una particular misión.

Rob conoce a los padres de Sharon, que se muestra entusiasmados con la boda pero no tanto con el embarazo. Todo empeora cuando a Sharon le comentan que, debido a su edad, su hijo podría nacer con síndrome de Down. Mientras, Fran pide explicaciones a Rob.

Sharon quiere inyectar pasión en su vida sentimental con Rob; y Rob, por su parte, sugiere que pase un fin de semana solo en París.